A BEAS, EN BUSCA DEL FRAILE

Me cuenta mi amigo Antonio que su pueblo es muy bonito, que tengo que ir a verlo, que esta situado a mas de 1000 metros de altura y que cada año se cubre de nieve y tiene un fraile, que tienes que encontrar.
Como no podía ser de otra manera acepte el reto.

Y esta mañana que tenia libre decidí bajar a la cochera haber si la moto arrancaba, por que lleva unos días que le cuesta desperezarse, debe de ser la batería, aun tiene la misma que traía cuando la compre y debe de estar necesitando un cambio.

No fue nada  difícil, le puse el contacto y enseguida se puso en marcha, debe de estar como los perros cuando les pones el collar,  que te esperan en la puerta.

A si que ella que tenia ganas de salir y yo que llevo tiempo sin rodar en moto, por que el tiempo no ha acompañado, a si que vamos a visitar Beas de Granada,  no veré a mi amigo porque el muchacho tiene que trabajar.

Lo primero que nos sale al encuentro es su iglesia:
Es el principal monumento del municipio, es de estilo mudejar, destaca la torre con el campanario, data de 1530-1540 y como casi todas las iglesias de la época fue construida sobre una antigua mezquita, se derrumbo años antes de la guerra civil española y desaparecieron definitivamente sus retablos de estilo barroco.

Su bonita plaza, y la casa del cura.

Calles estrechas con casas pintadas de blanco.

Para conseguir mi reto me ayude de unas señoras muy amables que barrían las puertas de sus casas, y me dijeron lo que era su famoso fraile y donde se encontraba.

Y aquí esta, y que no es mas que el capricho de la naturaleza, se levanta sobre una formación rocosa que la erosión y el tiempo han moldeado esta roca como el mejor escultor del mundo.

Bonitas vistas tiene el jodió fraile.

Esto es lo que va pasando cuando lo vamos fotografiando desde distintos ángulos.

Hasta que pierde su silueta.

Y rodando rodando me encuentro con la calle Moraleda, y da la casualidad que yo soy de Moraleda así que no me he podido resistir a fotografiar el rotulo de la calle y la moto.

Antonio creo que encontré tu fraile, aunque tengo que reconocer que cuando me metí en esta aventurilla lo ultimo que imagine es que seria una piedra.

Un saludo....