miércoles, 14 de octubre de 2015

POR LOS MONTES ORIENTALES.


Todo preparado, la mañana fresquita, como toca en Octubre, el sol despuntando por entre la Sierra, la moto impaciente, el deposito lleno, arrancamos y dejamos calentar el motor para que gire fino, engranamos primera por entre el trafico de la ciudad, sorteamos vehículos nerviosos que aceleran como locos en los semáforos como si les fuera la vida en ello, hay prueban las salidas del circuito cual Pedrosa, tocan el claxon pidiendo paso como energumenos, a si que decido salir de la jungla, por la A 44 hasta los montes orientales, donde nos espera la paz de sus pueblos y la belleza de sus paisajes..


Nos da la bienvenida Piñar en su bonito castillo de origen medieval. testigo fiel de la historia de estas villas.


Aquí empieza a salir el sol por entre sus muros,mientras a sus pies Piñar ya ha despertado de su letargo nocturno, la chiquilleria acude a sus quehaceres escolares los mayores a los suyos....


Los olivos se extiende por todas partes, todo lo que abarca la vista son olivos, a penas algunas tierras de secano dedicadas a la siembra de cereales...







Aquí la amabilidad de sus gentes nos ayudan en nuestro empeño, y su curiosidad les hace acercarse y preguntar, donde vas de donde vienes, eso para que es, bonita moto, corre mucho etc. etc.


Yo que tengo tiempo y que me gusta hablar con ellos voy satisfaciendo su curiosidad y en medio voy preguntando por la historia del municipio, que amablemente cuenta.



Ese banco de niebla tengo que atravesar, la visera del casco necesita un parabrisas como los coches, la visibilidad baja y yo bajo la velocidad, con los guantes trato de limpiar la visera pero no es el mejor método, menos mal que en pocos kilómetros lo dejo atrás, y me relajo en la conducción...


Este es mi selfie favorito.


La cámara engorda algunos kilos, a la moto.


En Iznalloz los martes hay mercadillo, así que me acerco a visitarlo, casi me gusta tanto como a algunas mujeres.


Ese reloj no va bien, se le habra acabado la pila.




Los montes orientales.





Lo que queda de su fortiticacion.









Y eso fue todo lo que dio de si la ruta.... Nos vemos en la carretera...